“Entre los tesoros que la Fundación Patiño ha preservado, destaca un valioso repositorio y archivo sonoro de la música autóctona boliviana, desarrollado por el Festival Luz Mila Patiño. Dentro de este legado musical, el violín ocupa un lugar especial. Este instrumento se ha convertido en un símbolo de la identidad musical boliviana, presente en las culturas de las tierras altas y bajas. Es en torno al violín que gira El Palacio Suena en Santa Cruz, invitando a los asistentes a adentrarse en una selva sonora que evoca las misiones jesuíticas de la Chiquitanía y el poder transformador de la música”, en la Capilla “Los Huérfanos”.
Un “peregrino” que se transforma con cada paso guía el recorrido, utiliza tecnología de audífonos inalámbricos para cada visitante, creando una experiencia inmersiva. Se puede disfrutar de espectáculos de mapping, música en vivo, iluminación y actuaciones que transportan al público a un viaje en el que la historia y la modernidad se encuentran.
La Fundación Patiño, en colaboración con la Asociación Pro Arte y Cultura (APAC), presentan una de las experiencias culturales más innovadoras y emotivas del año: El Palacio Suena en Santa Cruz – La Partitura Infinita, II Versión. Este proyecto inmersivo reúne música, historia y tecnología para llevar a la comunidad boliviana y a los visitantes internacionales a un recorrido sonoro y visual en torno a la música y el patrimonio boliviano.
Participan artistas sonoros y audiovisuales de OMNI Estudio, como Manuel Estrada y Martín García, junto a la tecnología de Quiet Eventos Silentes, que garantizan una experiencia sensorial de alto nivel.
El Palacio Suena, estará durante diez días, del 20 al 24 y del 26 al 30 de noviembre a partir de las 18:00 h, las entradas las pueden comprar en línea por TodoTix.com o en la Capilla , en la Capilla “Los Huérfanos”, los días del evento.
El miércoles 20 de noviembre se realizó la Avant Premier en la que los periodistas e influencers recorrieron los principales puntos del evento, como la "Selva", la "Iglesia" y el "Jardín del Violín". Al día siguiente, el violinista chiquitano Osman Moirenoi, de Urubichá, interpretó la pieza Don Januario del archivo de Moxos, utilizando un “violín quemado”, fabricado con madera de árboles afectados por los incendios en la Chiquitanía. Este violín simboliza la resiliencia y capacidad de transformar la destrucción en esperanza, un emblema del espíritu cruceño, destacan los organizadores.
CRÉDITOS
Redacción. Santa Cruz.
Fotografías: Fundación Patiño.